Juego y real (5)
9 Comentarios - 1/52/53/54/55/5 - 3 / 2

Image20-11-2015

 

Eusebio Sacristán habla de fútbol. Nada más llegar esbozó su sensibilidad por el juego. En sus tiempos de futbolista acariciaba la pelota sobre el césped dando aire a la jugada. Lo hacía suavemente, con sigilo. Posteriormente, en el banquillo, los focos tampoco le han apuntado excesivamente. La modestia y discreción siempre fueron su tarjeta de visita. Nunca hizo ruido, ni se arrogó triunfo alguno. Rara vez copó algún titular, y quizá por eso tuvo que recordar en la presentación como entrenador de la Real sus casi dos décadas como futbolista profesional en Primera; sus temporadas como parte del cuerpo técnico del FC Barcelona en la etapa anterior a Guardiola; el comienzo de la reconstrucción del Celta en Segunda, y sus años en el segundo equipo del Barça. En el fútbol se etiqueta la experiencia de un entrenador de la misma forma que se prejuzga la edad de un futbolista, por “prematuro” o por “viejo”.

 

   El conocimiento, la forma de transmitirlo y la capacidad de llegar al futbolista abren el camino: existe una idea concreta de juego, un método de trabajo para asimilar los conceptos y la prueba de campo. Esta llegará muy pronto para la Real, con la incertidumbre de empezar a medirse a los rivales por una vía diferente, nueva; compleja, seguramente.

 

   Eusebio ha dejado claro estos días cuál es su idea de juego. Es lo que siente y ha intentado desarrollar en sus equipos. Dice que cuenta con la tipología de futbolista adecuada para intentar implementar el estilo que le gusta: jugadores de perfil técnico y asociativo. Aplicados en el trabajo diario.

 

   La primera premisa, indispensable, es sacar la pelota limpia desde atrás para buscar superioridades. El portero es el primer eslabón de la cadena, muy importante en el inicio o continuidad de la jugada. Los centrales se abren y el mediocentro ayuda en la rampa de salida. Ahí se trabaja la primera ventaja ante el oponente. Es el punto de partida. Se precisan varios pases para mover al equipo rival y procurar ganar  la espalda de las líneas de presión, buscando siempre llegar al jugador libre más alejado. Una mecánica de juego que implica muchas cosas: lectura de la situación, capacidad de ejecución, sentido colectivo, mucha práctica y determinación. Veremos hasta dónde cala la ortodoxia, porque el tren está en marcha y los plazos no son cómodos. El tiempo en estas circunstancias no resulta un aliado.

 

   Una cultura de juego precisa de método y paciencia. Quizá vuelva a salir el famoso latiguillo, “… el físico…”, cuando se cuestione sobre aquello de la presión alta. Pero ese concepto no es el punto de partida, sino la consecuencia de haber llegado juntos y coordinados al momento donde se produce la pérdida del balón, en caso de producirse. Entonces llega la activación para recuperar la pelota, con la gente bien colocada para que los esfuerzos sean cortos, efectivos, y cercanos a la portería rival.

 

   La teoría pasará desde ya a la práctica, ante el Sevilla, un rival de gran nivel competitivo. Lo teórico va impreso en papel, irá en las consignas y las tareas diarias, en el entrenamiento. Pero hay un rival delante, que condiciona el desarrollo de la puesta en escena. Ese es el gran reto de la Real: poner en práctica un modelo de juego diferente; evolucionar sobre la marcha. La empresa es de altura. Hay que creer y sentirlo.

Full Story

Juego y real (4)
1 Comentarios - 1/52/53/54/55/5 - 3.667 / 3

Image14/11/2015

 

El viento sur ha traído consigo un nuevo cambio de rumbo. Aquello de sudar la gota gorda y apretar las tuercas ya no sirve. El discurso se ha evaporado sobre el terreno de juego. Vuelve la inquietud por el juego.

 

   Hace un año, exactamente, asistíamos  a la presentación en sociedad de David Moyes, un técnico que llegaba en loor de multitudes. Procedía del campeonato más distinguido del mundo en términos de solera, organización y capacidad de expansión. Sin embargo, la admiración que suscita el fútbol de las islas por su leyenda, liturgia, frenesí, espíritu competitivo y el ambiente que rodea a los partidos, choca frontalmente con la realidad que han venido mostrando sus clubes de clase media cuando se miden a equipos de otras latitudes. El juego marca la pauta.

 

   West Ham y Southampton son una muestra de la paradoja del fútbol británico: animadores de la Premier League, con un generoso gasto en fichajes, pero incapaces de superar las eliminatorias de clasificación para disputar la Europa League. El FC Astra Giurgiu rumano apeó al West Ham y el Southampton no pudo superar al Midtjylland danés. Incluso contando con técnicos extranjeros, que pueden tener otro prisma táctico, tendencia que se va acentuando en la Premier League. Remontando el mapa hacia el norte, el Celtic Glasgow, otrora clásico de las alturas a nivel internacional, no pudo clasificarse para la liguilla de la Champions, y ahora cierra el grupo A de la Europa League tras perder la semana pasada en casa ante el Molde noruego.

 

   David Moyes fue recibido en Anoeta con honores de estrella, a tenor de la parafernalia que desplegaron el día de su presentación. Aquello parecía Hollywood. La Real buscaba un impulso enérgico de la mano del fugaz mister del Manchester United. Un técnico acostumbrado a armar equipos a partir de su pericia para fichar jugadores. Pero, las costumbres del escocés no casaban con las intenciones del club.

 

   Cuando pisó el terreno todo resultaron ser carencias ante sus ojos: a nivel estructural y futbolístico. Miraba más allá de lo que tenía entre manos, suspirando por fichar, en vez de afanarse en trabajar la tierra que le ofrecieron. Conocer a fondo los mimbres y mejorar el rendimiento de los futbolistas que pusieron a su disposición debía ser el motor para demostrar su verdadera valía: ilusión por entrenar a un grupo de jugadores con un potencial interesante.

Full Story

El tulipán se marchita
0 Comentarios - 1/52/53/54/55/5 - 3.667 / 3

Image   16/10/2015

 

  Y Johan Cruyff aún no se ha manifestado al respecto. Cuando lo haga, temblarán los cimientos del fútbol holandés.  Algo tendrá que decir la voz más ilustre del balompié neerlandés.

 

   En la grada, algunos de los notables, gesticulaban con indisimulada frustración. Eran muy francos en las formas. ¡Aquello era un desastre! De Boer, el defensa central y actual entrenador del Ajax, y Rijkaard, el termómetro de la segunda época dorada del fútbol holandés, no podían disimular su desazón. La selección que había quedado en segundo y tercer lugar en los dos últimos Mundiales volvía a morder el polvo en casa, culminando una fase de clasificación para la Euro’2016 calamitosa.

 

   Echamos la vista hacia atrás. Quince meses, no más. En los días previos a la Copa del Mundo de Brasil, los futbolistas convocados por Louis Van Gaal se divertían en la playa de Ipanema. Entonces, recordábamos la estampa de Dinamarca, que en 1992 llegó por sorpresa a la Eurocopa de Suecia, ocupando el lugar de Yugoslavia, en pleno conflicto bélico. Los nórdicos terminarían ganando aquel torneo.

 

   De forma desenfadada llegaron los holandeses a Brasil, contrastando con las dudas que se cernían sobre ellos. Su seleccionador, comprometido con el Manchester United para la temporada siguiente, había tomado una decisión que sonaba impopular en un país tan exquisito en las formas. En los últimos amistosos había probado con una defensa de cinco hombres para cubrir las espaldas de sus grandes estrellas. Apostaba por cerrar filas y correr en pos de la victoria. Curiosamente, con los más jóvenes en la retaguardia. Y los ilustres veteranos a partir de tres cuartos: Sneijder, Kuyt, Robben y Van Persie.

Full Story

Haztegia oinarri
2 Comentarios - 1/52/53/54/55/5 - 3.333 / 3

Image23/09/2015

 

Udaberriko arratsalde bero hartan ezintasuna gailendu zen partida osoan, argi gorria pizteraino. Ezinak ekina azpiratuko zuela zirudienean, zoriona nabarmendu zen azken hatsean.

 

   Harmailak eztanda egin zuen. Jokalariak dardar batean,  entrenatzaileak hartu zuen hitza, egun hartako sufrimendua eta bidean izandako gorabeherak hizpide: irakaspen gordinaren balioa. Eskarmentua bidelagun, aste batzuk lehenago hasitako lana jarraitu nahi zuen. Berak ondo ezagutzen eta sinesten duen bidean aurrera. Bere mutilekin. Etxean hazitako gazteekin.

 

   Agintariek, ordea, aulkirako beste asmo bat zerabilten buruan. Baina, arantzaz beteriko testuinguruan, emaitzez haratago, etorkizuna eraikitzeko lurra landu beharra zegoen. Kluba  berpiztu, aldarte egokian, arratsalde hartan taldeak Sabadellen eragindako poza eta algara abiapuntu hartuta.

 

    Berdegunean gorriak pasa eta gero etxera begira jarri ziren agintariak, ezinbestean. Merke eta ona, pentsatuko zuten, halabeharrez. Futbolean askotan hori izaten da ordena: lehenengo, zenbatekoa; gero, benetako balioa. Hiru hilabete geroago, beste hainbat tokitan gertatu bezala, ordena aldatzen ari da: ona, lehenengo; eta, gainera, merke (erangingarri esatea nahiago).

 

   Jokalariaren balioak, talentutik abiatuta, konpromisoan du oinarria: lanerako grina, talde lanaren espiritua eta ilusioa. Berdegunetik harmailetara doan zubia sendotzen ari da, talde gidariak denboraldi-aurrean iragarri bezala. Etxeko entrenatzailea behin behineko baliabidetzat (suhiltzailetzat) jo zuten joan zen denboraldiaren hondarrean, eta beste aukera batzuek aintzat hartu zituzten bide berria jorratzeko, baina taldea abian zen udaberriaz geroztik. Azkenean, etxeko lemazainari eutsi zioten.

Full Story

Islandia: el volcán futbolístico
0 Comentarios - 1/52/53/54/55/5 - 3 / 2

Image07-sept-2015

 

 

Aquel día, en Tallin, Arnór abandonaba el terreno de juego con la sensación de que algo histórico estaba sucediendo. Pero, la felicidad no era completa. Él quería jugar junto a Eidur, diecisiete años más joven. Es la diferencia de edad que separa a los Gudjohnsen, padre e hijo. El apellido más célebre del balompié islandés.

 

   Arnór Gudjohnsen había dejado su impronta en Bélgica, defendiendo los colores del Sporting Lokeren y el Arderlecht. En 1980 se enfrentó con los primeros a la Real Sociedad en octavos de final de la Copa de la UEFA. El Lokeren tenía una delantera impensable en los tiempos que corren: Gregorz Lato, Preben Elkjaer Larsen y ArnórGudjohnsen. El primero era la estrella de Polonia, una extraordinaria selección; el segundo comenzaba una brillante carrera, formando parte de la Dinamarca más cautivadora; y el tercero era una especie de nota exótica, porque apenas había noticias del fútbol  islandés.

 

   El siguiente guiño de aquel misterioso país llegó en septiembre de 1982, cuando un equipo islandés se cruzó en primera ronda de la Copa de Europa con la propia Real: era el Vikingur de Reykjavyk. Resultaban simpáticos desde la sonoridad de sus apellidos. Todos sonaban igual.

   Un día, en el viejo álbum de cromos, asomó un rubio, raudo como una centella. Lo había fichado el Hércules. Pétar Petursson tuvo el honor de jugar junto a Mario Alberto Kempes, otro gran mito asociado de alguna manera al fútbol islandés.

 

   Desde Bélgica llegaría a la Liga, bastantes años después, un fino estilista procedente del Genk: Thordur Gudjonsson. Había ganado el campeonato belga con el conjunto de Limburgo, pero apenas jugó un puñado de partidos con la UD Las Palmas. Para entonces, la Bundesliga tenía entre sus notables al centrocampista Eyjólfur Sverrison, campeón de la Bundesliga con el Stuttgart en 1992; a la estela de un emblema del club, Ásgeir Sigurvinsson, que también se alzó con la ensaladera en la temporada 1983/84. Anteriormente fue referente del Standard de Lieja y jugó durante diecisiete años en la selección absoluta de su país.

 

   Otro caso excepcional es el de Herrman Hreidarsson, un futbolista que militó durante quince temporadas en diversos equipos ingleses, hasta que volvió a casa hace tres años.

 

   Eran de los contados futbolistas islandeses que tenían notoriedad  fuera de su país, más proclive a otro tipo de actividades. La localización geográfica, su peculiar orografía, y los rigores de la climatología, invitaban más a practicar los deportes en sala. Pero, aquellos jugadores que un día salieron a buscar fortuna lejos de la isla comenzaron a poner los cimientos del futuro.

 

   El testigo pasaba de mano en mano, cada vez con mejores argumentos, en un lugar donde la tierra late. Allí, modestos campos se abren paso entre volcanes que moldean el piso y pintan el paisaje. Hafnarfjordur, Valur, Keflavik, Stjarnan, Akranes, Breidablik… son alguno de los doce clubs que conforman la máxima categoría del futbol islandés. Este año tampoco tendrán representación en los torneos europeos, porque todos los equipos del país han quedado eliminados en la fase previa de la Champions y la Europa League.

 

   El éxodo de futbolistas islandeses fue en aumento con el paso del tiempo, preferentemente a las islas británicas, donde llegó un buen día Eidur Gudjohnsen, el hijo de Arnór. Su eclosión en el Chelsea le catapultó al FC Barcelona, para volver más tarde a la Premier League convertido en campeón de Europa. A punto de cumplir 37 años, se ha embarcado en la aventura china, tras su paso por el Bolton Wanderers. Y sigue defendiendo la elástica de la selección, 19 años después de recoger el testigo de manos de su padre en Estonia.

Full Story

Juego y real (3)
0 Comentarios - 1/52/53/54/55/5 - 4 / 4

Image27 - Ago - 2015

 

La pelota estaba desorientada. Sabía cuál era la meta, dónde estaba situada, pero los caminos para alcanzarla atendían a un patrón muy confuso. Nada de armonía. Ante todo, cubrirse las espaldas y fijar la mirada lejos de la zona que marca “peligro inminente”.

 

   La Real había reforzado las líneas más alejadas entre sí para ganar consistencia defensiva y desequilibrio a partir de tres cuartos de campo. En los primeros pasos del nuevo curso presentaba dos vías abiertas para activar la ofensiva, a partir de las peinadas de Xabi Prieto y Jonathas; o contragolpe, partiendo de una recuperación más o menos alejada de la puerta rival. Cualquier otra intención resultaba infructuosa.

 

   Entre las primeras adquisiciones, Diego Reyes asoma para apuntalar la defensa, con capacidad para salir jugando; y dos atacantes nuevos se suman a la nada desdeñable nómina de delanteros que ya tenía la Real: Bruma y el anteriormente mencionado Jonathas. Pero el entrenador David Moyes quería más.

 

   El delantero islandés Alfred Finnbogason, principal fichaje del pasado ejercicio, terminó marchándose a préstamo al Olympiacos, campeón de la liga griega, equipo que veremos en la Copa de Europa. Finnbogason no terminó de cuajar, por diferentes circunstancias. Venía de un contexto de juego muy definido en el Heerenveen, bien estructurado a partir de la pelota, y quizá la indefinición que ha mostrado la Real en su juego le haya penalizado. Habrá que seguir su progresión en tierras helenas.

 

   La punta de lanza en la Real ha cambiado de forma sustancial. Jonathas es un delantero más poderoso, rompe muy bien al espacio y combina perfectamente. En el clásico 1-4-4-2 que plantea el entrenador, parece haber encontrado la pareja ideal para Carlos Vela. Se entendieron bien en su primera toma de contacto, tendieron puentes para llegar a la meta, y apuntan alto, si las circunstancias no lo evitan. Bruma, desde posiciones exteriores, intenta desequilibrar en carrera con su espíritu de aventura, contrastando con el socio del otro lado, Xabi Prieto,  más cerebral y pausado. Ambos asisten a los laterales en tareas defensivas, pero cuando la Real defiende por acumulación y muy atrás, la posibilidad de contragolpe tras recuperación resulta kilométrica.

Full Story

El volcán marsellés
0 Comentarios - 1/52/53/54/55/5 - 3.667 / 3

   Image18-AGO-2015

 

Marsella se deprime tras la marcha de Marcelo Bielsa. El que fuera ídolo de la hinchada ha dejado tras de sí un poso de amargura. Algunos futbolistas de la plantilla acusan el vacío dejado por el argentino; otros, sin embargo, no disimulan el alivio que supone la marcha del técnico que los relegó al banquillo. Pero, por encima del impacto que ha producido la dimisión de Bielsa, con sus argumentos y la consiguiente réplica del presidente Vincent Labrune, está la frustración de unos incondicionales que han visto cómo ha disminuido de forma considerable el potencial del plantel y las posibilidades de luchar por algún título.

 

   El Olympique de Marsella totaliza 22 entrenadores desde que consiguiera alzar la Copa de Europa en 1993, el mayor hito de su historia. Los años de Bernard Tapie al frente de la institución, época de grandes fastos y controversias, terminaron dejando muy tocado el orgullo del campeón. El OM volvió a trompicones al primer plano tras un traumático descenso a Segunda, y desde entonces Marsella ha sido un volcán en constante erupción. Allí los extremos se tocan, y de repente salta la chispa.

 

   Tras su vuelta a la élite, luego de purgar dos años en Segunda por amañar un partido de liga ante el Valenciennes en 1993, el Marsella le disputó hasta el último segundo el campeonato 98/99 al Girondins de Burdeos. Un gol in extremis de Pascal Feindouno en el Parque de los Príncipes para el conjunto bordelés echó por la borda las ilusiones del Marsella. Su entrenador de la época, Rolland Courbis, tardó pocos meses en abandonar el puesto. Era un equipo que tenía varios campeones del Mundo en sus filas. Marsella es muy impulsiva. No ganar remueve los cimientos. Siempre se han buscado grandes fichajes para aplacar la decepción. Pero, en los los últimos años, la gran referencia ha estado en el banquillo.

Full Story

Aitzindariak direlako
0 Comentarios - 1/52/53/54/55/5 - 3.667 / 3

Image(09/06/2015)

 

 

 

 

Ainhoa Tirapu, Eli Ibarra, Irene Paredes, Leire Landa, Erika Vazquez. Euskal Herriko bost jokalari izango dira Kanadan jokatuko den emakumezkoen Munduko txapelketan. Aurrenekoz. Historia liburuetan agertuko dira, aitzindarien zerrendan.

 

   Espainiako selekzioa estreinakoz arituko da Mundialean. Europako hainbat herrialdek aurrea hartu zuten aspaldi: Alemaniak eta eskandinaviarrek, bereziki. Eskolan bultzatu izan da futbola eta jarduera hori aspaldi dago errotuta gizartean. Azpiegiturak eta babesa tarteko. Munduko txapelketaren harira, hango hedabideetako lerroburuetan azaltzen dira emakume futbolariak egun hauetan.

 

   Suedia, Frantzia eta Alemania goi-mailako selekzioak dira. Kanadara aspaldi iritsi ziren (Espainiako selekzioak txapelketa hasieraren bezperan lur hartu zuen). Euren egoitzetan egunak daramatzate prestaketa lanetan, ordutegi berrira moldatzen. Onenen artean lehiatzen ohituta daude herrialde horietako klubak, Txapeldunen Liga oinarri hartuta. Alemaniako taldeak nagusi izan dira azken urteetan Europan, titulu gehienak eskuratuta, eta jokalariak erakartzeko testuinguru aproposa sortu dute. Denboraldi amaierako ospakizunetan, Bayern Municheko mutilen eta nesken taldeko jokalariak elkarrekin ageri ziren hiriko udaletxean, Bundesligako garaikurrak zaleei eskainiz.

 

   Klub profesionalen egituran emakumezkoen taldeak sortzen eta bultzatzen ari dira azken urteetan. Gizonezkoen Bundesligan bezala, emakumezkoenean ere Bayern Munich eta Wolfsburgo ageri dira indartsuenen artean. Frantzian antzekoa gertatzen da, PSG eta Lyonekin. Kanadan parte hartuko duen Frantziako selekzioko hamazazpi jokalari bi talde horitakoak dira. Philippe Bergeroo ziburutarraren aginduetara arituko dira Kanadan. Mundialerako bidean ospe handiko garaipenak lortu dituzte eta trebatuak dira gorengo mailan. Frantzia hirugarren aldiz izango da Munduko Kopan.

 

   2003an jokatu zuen aurrenekoz Munduko txapelketa. Ingalaterra azpiratuta sailkatu zen lehen aldiz. Corinne Diacre kapitainak erdietsi zuen garaitzeko gola. Emakume horren adorea erabakigarria izan da bidean aurrera egiteko, aitzindaria baita hainbat alorretan.

Full Story

El camino de Nabil
0 Comentarios - 1/52/53/54/55/5 - 5 / 1

nabil-23/03/2015-

 

 

Creo que el fútbol francés cuenta con los mejores jugadores jóvenes del mundo. Marcelo Bielsa.

 

   Hace dos semanas un futbolista menudo asomó por La Mosson (Montpellier) junto a sus jóvenes colegas y puso patas arriba el partido. Ganó el Lyon, con la misma autoridad que demostró unas  jornadas antes en Burdeos. Cinco goles en ambos partidos.

 

   Nabil y sus jóvenes compañeros se habían recreado en Chaban- Delmas con un 0-5 que suponía un mensaje claro a sus oponentes más acreditados: Marsella, París y Mónaco. Montpellier fue la siguiente parada.

 

   Pasaban las jornadas y el peso de la responsabilidad no parecía hacer mella en la tropa de Gerland. Poco a poco iba dejando atrás su particular travesía del desierto, con la luz al frente; luminosidad que emana del flamante estadio que en breve estrenarán: Le Stade des Lumières.

 

   De niño, no lejos de allí,  jugaba Nabil en el gran parque de Lyon, mostrando su destreza con la pelota. Disfrutaba con sus hermanos pequeños y amigos de la infancia. Muchos de ellos de origen argelino, como él. Su familia había emigrado a Francia y Nabil nació a orillas del Ródano. Allí creció viendo ganar al OL, séptuple campeón de Francia coincidiendo con el cambio de siglo.

 

   Nabil ingresó en las categorías inferiores del Lyon, pero tras una larga lesión quedó relegado. Buscó acomodo en otros pequeños clubes de la ciudad para seguir disfrutando del juego, y terminó aflorando el  talento, de forma natural. Su constancia le devolvió al club que le había desechado y ahora alumbra.

Full Story

Juego y Real (2)
1 Comentarios - 1/52/53/54/55/5 - 5 / 2

    ImageAlguien debió perder los papeles en el camino y parece que no hay manera de recordar la fórmula. Pelota al pie, al espacio, pelota frontal o juego corrido. El sábado pasado no era extraño imaginar al poderoso Andy Carroll con la camisa blanquiazul en Anoeta batiéndose en duelo por los aires con los futbolistas franjirrojos. Los constantes envíos del preciso guardameta de la Real eran una suerte de azar en la propuesta del conjunto local. La pelota, mayormente, volvía escupida a campo propio, se perdía por la línea lateral, y a veces nacía una segunda jugada tan alocada como imprecisa. La primera parte ante el Rayo recordó, por momentos, a la del día del Levante. Entonces se contabilizaron cuarenta y seis envíos en largo sólo entre el portero y los dos defensas centrales. No hubo forma de hilvanar juego. La pelota iba y venía, más pronto que tarde.

 

   Ante el Rayo la tendencia inicial reflejaba el pase en largo como pistoletazo de salida. A la expectativa. La Real sufría cuando intentaba sacar la pelota limpia desde atrás, sin conseguir conexiones que procuraran fluidez al juego. Ni amplitud ni profundidad. Una suerte de batiburrillo, sin lazos de juego que pudieran aportar algo de luz. La Real sufre en las disputas, busca transiciones rápidas y salir corriendo. Pase frontal, cruzado o largas carreras frenéticas, a imagen y semejanza de las galopadas de Canales con la pelota cosida al pie. El fútbol combinativo parece postergado. O, directamente, no resulta. ¡Con jugadores como Markel, Granero, Xabi Prieto, Canales, Vela y Agirretxe en el campo! Futbolistas de buen pie.

Full Story


Post anteriores.
< 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 >